El otro día, en medio de una charla sobre cómo dar lugar a una idea que termine haciéndote rico, surgió el concepto web 2.0

Para mucha gente, pese a estar más o menos al tanto de las nuevas tecnologías y de su aplicación en la sociedad de la información, es un término ambiguo e incluso desconocido.

La wikipedia arroja algunas luces sobre el tema:

El término Web 2.0 fue acuñado por O’Reilly Media en 2004 para referirse a una segunda generación de Web basada en comunidades de usuarios y una gama especial de servicios, como las redes sociales, los blogs, los wikis o las folcsonomías, que fomentan la colaboración y el intercambio ágil de información entre los usuarios.

Es decir, si el concepto web 1.0 es el aplicado al de los inicios de Internet, en los que el diálogo era meramente unidireccional: un cliente se conectaba a Internet, solicitaba determinado recurso y éste le era mostrado; la web 2.0 surge como respuesta a la necesidad de que la comunicación viaje en los dos sentidos. El cliente ha pasado de ser un mero observador de información a participar en ella y de ella.

Esto ha supuesto un nuevo boom para la actual Sociedad de la Información. El acceso a Internet es cada vez más universal y esto conlleva que cada vez más gente con menos conocimientos en informática y redes pueda participar de forma activa en todo lo que tiene que ver con la red.

Gracias a este ‘boom’, páginas como Facebook, Fotolog.com, Twitter, Menéame.net… han conseguido alcanzar los puestos más altos de visitas en la actualidad.

La moraleja de todo este asunto es que si uno quiere triunfar con algo debe conseguir dos cosas fundamentales:

  1. Que ese algo sea sencillo de entender
  2. Que ese algo interese a la gente

Parece simple ¿verdad?